Las mejores prácticas de seguridad en redes
Introducción
En un mundo cada vez más digitalizado, las redes informáticas se han convertido en una herramienta imprescindible para la comunicación, el trabajo y el ocio. Sin embargo, también han surgido nuevas amenazas para nuestra seguridad, como el malware, el phishing o el robo de identidad. Es por eso que es fundamental adoptar unas prácticas de seguridad adecuadas para no poner en riesgo nuestra información ni la de los demás.
Utilización de contraseñas seguras
Uno de los primeros pasos para una buena seguridad en redes es utilizar contraseñas fuertes y seguras que sean difíciles de adivinar. Para evitar contraseñas fáciles de descifrar, se deben combinar letras, números y símbolos, y no utilizar palabras comunes o información personal. Además, es importante cambiar las contraseñas regularmente y evitar reutilizarlas en diferentes cuentas.
Autenticación de dos factores
La autenticación de dos factores es una técnica que agrega una capa adicional de seguridad en el acceso a nuestras cuentas de redes. Esta técnica requiere que, además de la contraseña, se ingrese un código de seguridad único que se envía a otro dispositivo, como un teléfono móvil o una llave de seguridad. Esto hace que sea mucho más difícil para los ciberdelincuentes acceder a sus cuentas incluso si logran adivinar la contraseña.
Actualización y parches
Al mantener las aplicaciones y sistemas operativos actualizados y parcheados, se reducen las vulnerabilidades potenciales que podrían ser explotadas por los ciberdelincuentes. Con cada actualización, los desarrolladores de software corregirán las fallas de seguridad y corregirán los errores de código que, de lo contrario, podrían considerarse una brecha de seguridad potencial para los atacantes.
Auditoría de seguridad
Es necesario llevar a cabo auditorías de seguridad de forma periódica para conocer las vulnerabilidades existentes en el sistema y tomar medidas para corregirlas. Puede realizarse internamente dentro de la empresa o puede ser delegado a una empresa especializada. El objetivo es detectar posibles vulnerabilidades de seguridad en toda la infraestructura de redes y solucionarlas antes de que los atacantes puedan explotarlas.
Configuración segura del router
El router es uno de los componentes más importantes en términos de seguridad en una red de área local. Es el encargado de establecer la conexión entre los dispositivos que se conectan a ella y es el primer muro de contención para los ataques de los ciberdelincuentes. Configuraciones importantes a considerar son la actualización de su firmware y contraseñas seguras y únicas para su acceso.
Firewall de red
El firewall es una medida de seguridad muy importante que permite regular el tráfico de la red y evitar posibles ataques. El firewall actúa como una barrera entre la red de la empresa y el mundo exterior, permitiendo solo el tráfico de red autorizado y bloqueando el tráfico no deseado. Además, se pueden configurar reglas específicas para limitar el acceso de ciertos usuarios o dispositivos a ciertas partes de la red.
Seguridad en la nube
El almacenamiento en la nube es muy común en la actualidad, la información en la nube se debe proteger de los ciberdelincuentes al igual que la información almacenada en el disco duro local. Las medidas para la seguridad en la nube pueden incluir el cifrado de los datos en la nube, la gestión de accesos seguros y el monitoreo en tiempo real de la actividad en la nube.
Implementación de un plan de recuperación ante desastres
Incluso si se tienen todas las medidas de seguridad establecidas, los desastres pueden ocurrir y la información se puede perder o dañar. Por lo tanto, es importante tener un plan de recuperación ante desastres en su lugar para garantizar que la información se pueda recuperar de manera fácil y segura cuando ocurra un desastre.
Conclusión
En resumen, la seguridad en redes es esencial para garantizar la protección de la información personal y profesional. Es importante tener contraseñas seguras y únicas, autenticación de dos factores, mantener actualizado y parchear software, realizar auditorías de seguridad, configurar el router y firewall de manera segura, asegurar la información en la nube y tener un plan de recuperación ante desastres. Al seguir estas prácticas recomendadas, es posible mantener la integridad y confidencialidad de la información y evitar posibles amenazas de seguridad.